Mira a estos dos palomos... Desconocemos si son pareja de hecho, carne y pescado reciclado, dos carnes con atracción, dos pescados con lo mismo, una carne que cree que es pescado y un pescado que cree que es carne o qué carallo son, pero lo que ya sí sabemos es que uno se ha bajado los pantalones, las calzorras y se ha puesto enposición doblado el espinazo. Desconocemos a ciencia cierta cuál es el objetivo real de la bajada. La prensa adicta al rojo dice, pásmense, que "el gobierno da los primeros pasos para destensar el problema catalán". Hay quien incluso los llama "la semilla del diálogo", en ocurrente paráfrasis de una gran película de terror diabólico. Más encaminado parece el segundo, donde el diablo es protagonista, como en la cruda realidad. Nosotros lo que creemos es que la razón de la bajada de Pedrito Megamix es poner el culito en pompa para recibir al golpista y su primer golpe de porra en pleno cortachurros. Porras y churros, complemento perfecto para este chocolate en el que nos ha metido el cuesco Mariano, felizmente gasificado. Mientras, los dos tontosmuy tontos miran atónitos, a derecha e izquierda del diablo receptor. Sí, estos dos, Nazolo y Tontón, uno sepa-nazi y el otro rojeras-bobalicón. Este es el panorama, amigos.
¡Qué grande es Rafael Nadal y qué diferencia con este par de payasos!
Emoción de escuchar el himno que estos dos capullos tanto desprecian y de ver levantar a Rafa la Undécima Copa de Mosqueteros!
¡A por ellos, Rafa! ¡Viva España!
Pues sí, estaremos en manos de esta marioneta nazi y de este tonto con garras, creo, durante un buen tiempo.
Y mira que se ha dicho por aquí que que hay que poner a los buenos a jugar por la derecha. Pero, claro, con un entrenador como Mariano el Pelao (nunca Pelé) es imposible; habló mucho de jugar por la derecha pero siempre jugó por la izquierda, y así terminó.
Tenemos en el banquillo una buena dupla para jugar por la derecha: Abascal y Smith, démosle cancha.
¡Arriba España!